El 88 Congreso Nacional de Cafeteros, llevado a cabo, de manera virtual, del 1 al 4 de diciembre, terminó satisfactoriamente, con la presencia de los miembros de los 15 Comités Departamentales de cafeteros, principales y suplentes, primera vez en la historia del gremio, para un total de 180, que junto con los 15 Miembros del Comité Directivo y Nacional e igual número de Directores Ejecutivos de los departamentos cafeteros, la Gerencia General y su staff administrativo central, congregó a cerca de 250 personas, las cuales estuvieron conectadas al Congreso, sin haberse dejado de presentar algunas pequeñas fallas de conectividad, en varios casos asociadas a las condiciones aún precarias de las comunicaciones existentes en el sector rural.
El máximo evento democrático de los cafeteros, se desarrolló con una programación variada: una, la estatutaria, para los delegados principales quienes tienen derecho a voz y voto, son los encargados de delinear las políticas para el fortalecimiento gremial y el cumplimiento misional de la Federación; otra, para los suplentes, de carácter informativo sobre las distintas actividades que adelanta el gremio cafetero a través de los organismos gerenciales, operativos y estratégicos. No obstante, haber sido el primer Congreso no presencial, es importante remembrar las versiones anteriores, desde su fundación, la Federación realizó todos de manera presencial, en donde los caficultores de las diferentes regiones del país se daban cita y compartían sus logros y frustraciones, deseos y esperanzas para que su actividad: La caficultura, se pudiera consolidar día a día, eran encuentros de profunda inmersión en las diferentes problemáticas del sector y de una gran empatía, calor humano y camaradería entre los asistentes
Los esfuerzos técnicos y de logística diseñados por la Federación propendieron por mantener los elementos antes mencionados, de tal manera que este Congreso reafirmara los valores y principios que la han hecho grande en la historia del país y en su dinámica económica, demostrando en esta época de aislamiento social su gran capacidad de resiliencia, tenacidad y compromiso, hecho que llevó a que desde el Presidente de la República y sus ministros de Agricultura y Desarrollo Rural, Hacienda y Crédito Público y Comercio, Industria y Turismo, destacarán el papel preponderante jugado por nuestros caficultores para enfrentar los graves problemas generados por la pandemia, poniendo al gremio como ejemplo para otros sectores productivos, habida cuenta de haber alcanzado una producción cercana a los 14 millones de sacos de café y unos ingresos de $8.7 Billones de pesos que irriga la economía del país y beneficia a 540.000 familias cafeteras, coadyubando al logro de mayores niveles de bienestar y prosperidad, a pesar de que la brecha es muy grande entre la rentabilidad que logra la industria cafetera internacional y la que le genera al productor que, a duras penas, en muchos casos no alcanza a cubrir los costos de producción. He aquí una de los grandes retos que tiene la Federación, lograr mayores niveles de rentabilidad para los caficultores.
Aspecto central en el trabajo de las cuatro comisiones en que se desarrolla el congreso y que grosso modo abordó los siguientes aspectos, por comisión, y sobre los cuales se presentaron sendas propuestas, las que tendrán que incorporarse el Plan Estratégico de la Federación para el año 2021, ellos fueron:
En Desarrollo Social, se destacaron temas trascendentales como: Educación formal, protección social y liderazgo gremial, educación para el trabajo y el desarrollo humano, vivienda, saneamiento básico y energético, vías, alianzas nacionales e internacionales, familias cafeteras, conectividad de género y empalme generacional. En Comercialización y Negocios del Café, las discusiones versaron sobre cafés especiales y sostenibles, estabilización del precio, innovación y tecnología, modalidades de comercialización, promoción y consumo. En Producción y Gestión Ambiental, los congresistas analizaron temas asociados a la Gestión Integral del Recurso hídrico, la Gestión de la Biodiversidad, la Gestión Forestal y agroforestal, la variabilidad climática, el programa de renovación y la estrategia: más agronomía, más productividad y más calidad igual mayor rentabilidad. En la Comisión Administrativa y Financiera, se trataron temas relevantes como: El Problema pensional de la Flota Mercante Grancolombiana, Conectividad, transformación digital y presupuesto. Si bien es cierto que todo lo concluido no resuelve los más diversos problemas que tiene la caficultura nacional, es innegable que los cafeteros fueron fieles al slogan del Congreso y demostraron que el Café es la Esperanza de Colombia. La tarea se cumplió, ahora viene la gran responsabilidad de trabajar por su materialización.