Editorial: Cordura, investigaciones y rápidas decisiones

Seis días después de concluidas las votaciones para elegir nuevos mandatarios y curules en corporaciones tanto locales como regionales, los problemas por supuestos fraudes y manipulación de documentación del proceso de elección se extienden de forma preocupante por todo el Cauca.

Las noticias de asonadas, protestas, plantones y otras formas de manifestación en torno a las registradurías y puntos donde se realizan los escrutinios en municipalidades como La Sierra, Rosas, Timbío, Bolívar, Santa Rosa y Villa Rica, han manchado el desarrollo de una jornada tranquila como la que vivimos este domingo, enmarcada entre el proceso de fin del conflicto que avanza en La Habana, Cuba con las Farc.

Es una lástima que la turba enfurecida en La Sierra compuesta por ciudadanos que no aceptaron los resultados, se ensañara con el material electoral, causando la pérdida del mismo, lo que dejó sin posibilidad de hacer un escrutinio en esta localidad surcaucana. Ante esta contingencia, se analiza por parte de las autoridades correspondientes, la posibilidad de realizar elecciones atípicas para poder determinar quién dirigirá los destinos de esta población al igual que sus corporados.

Es de anotar que en La Sierra los resultados del preconteo arrojaron como ganador al candidato de la U. Miller Hurtado con 45 votos más que Jesús Eduardo Tróchez del partido Liberal.

En otros municipios nombrados en este escrito, las cosas no han pasado a mayores, pero un ambiente tenso originado por movilizaciones continuas con arengas donde se exige reconteo de votos al argumentarse algún tipo de fraude, se vive día a día.

Desde esta tribuna editorial hacemos un llamado a la cordura a fin de evitar situaciones tan delicadas como las que se vivieron en La Sierra en la noche del domingo anterior. A los ciudadanos y candidatos inconformes les decimos que el proceso electoral cuenta con medidas que garantizan la transparencia en la revisión de las votaciones. Hablamos de reconteos y del escrutinio final donde se revisa con detalle todo el material que arrojó la jornada para determinar si las cifras del preconteo cuadran o por el contrario, ordenar nuevos conteos de votos en determinados puntos para así llegar a cifras exactas que ratifican las posiciones.

Por todo lo anterior, lo ocurrido en La Sierra deja sin herramientas a la Registraduría y al Consejo Nacional Electoral para determinar quiénes ganaron en esa localidad. Fue un grave error de aquellos ciudadanos que motivaron a la turba para que actuara como actuó el cual a propósito, debe ser investigado hasta las últimas consecuencias ya que en medio de todo la destrucción de material electoral es un grave delito.

Igualmente, exigimos que las autoridades electorales, al igual que los entes de control y de justicia, investiguen a fondo las denuncias interpuestas por la ciudadanía. En La Sierra por ejemplo, un video deja entrever que una bolsa que no se contó con un número indeterminado de votos para Jesús Tróchez, apareció presumiblemente en la basura y no se contabilizó para el proceso; además, otro material visual, mostró como un funcionario municipal llevaba propaganda electoral a favor del candidato Miller Hurtado. Son denuncias que no pueden quedar en el aire y merecen un rápido desarrollo que llegue hasta las últimas consecuencias.