La guerra entre el Ejército colombiano y las disidencias de las Farc no se detiene: dos integrantes de este último grupo armado al margen de la ley fallecieron en medio de combates que se registraron en el sector de Huasanó, zona rural de Caloto.
Es que desde el pasado martes, en esta zona del norte del departamento, se registran combates en las diferentes veredas y corregimientos, como bien lo denunciaron campesinos e indígenas de localidades como Corinto, Miranda, Toribío, entre otras.
Por eso las acciones de la fuerza pública se mantienen en esta área, con el fin de contrarrestar las acciones militares de la columna Móvil ‘Dagoberto Ramos´ de las Farc.
En medio de esta situación, los soldados lograron dar de baja a dos integrantes de este grupo armado organizado residual, quienes se desempeñaban como francotiradores de este grupo al margen de la ley, al servicio de alias Whisky y alias Toro, cabecillas de comisión.
De acuerdo con la versión del Ejército, este resultado se obtiene ante la presión de las tropas, tras sostener combates con miembros de esta organización armada ilegal, donde se logró además la incautación de un fusil Remington para francotirador, un fusil Fall, un arma corta, munición calibre 7,62, una granada de fragmentación, lente de campaña, material de intendencia, brazaletes alusivos a la estructural y documentos de interés para la inteligencia militar.
Cabe resaltar que en lo corrido del año 2021, el Ejército Nacional, en su ofensiva militar en esta zona del departamento del Cauca, ha neutralizado a ocho integrantes de esta estructura residual, entre ellos alias Jhoncito, cabecilla de finanzas; alias Camisa y a alias Yiyo, debilitando el brazo armado y el poder combativo de este grupo armado organizado residual.
“El Ejército Nacional continúa adelantando operaciones militares con el firme propósito de contrarrestar el accionar delictivo de los grupos al margen de la ley en el norte del departamento del Cauca”, expresaron los integrantes del Ejército.
Mientras tanto, las comunidades campesinas e indígenas asentadas en las zonas rurales de estos municipios denunciaron que los combates se registran cerca a las viviendas.
“Denunciamos que la población civil está en riesgo, desde la semana pasada estos enfrentamientos suceden cerca de las viviendas y las personas quedan en medio de las balaceras”, denunciaron líderes sociales de la zona.