CAYO BETANCOURT
Tenemos una crisis de liderazgo, para solucionar este inconveniente, en el mediano plazo, se requiere formar a los jóvenes para desarrollar habilidades en el área. Desafortunadamente las oportunidades de recibir entrenamiento son pocas en las empresas, especialmente para personas que inician su vida laboral. Generalmente se ofrecen programas a partir de gerentes de nivel medio en adelante.
“Un líder se reconoce por su trabajo y apoyo a colaboradores, observa el resultado de su equipo como un todo y no un logro individual. Permite que otros crezcan sin advertir competencia en sus actividades, crea entornos de diálogo y está listo para tomar nuevos retos.”
La necesidad de nuevas habilidades brinda oportunidades de crecimiento a las personas y cambios de dirección a las empresas. Un gerente capaz de interactuar con su equipo, ayudarlo a mejorar a través de compartir sus experiencias y apoyar eldesarrollo de estos, sería la situación ideal. Además, en algunos casos las actividades diarias no permiten hacer un seguimiento y tomar acciones para corregir los puntos encontrados. Este inconveniente genera entornos complejos, con personas estancadas profesionalmente y una percepción negativa de los directivos.
Mientras las instituciones educativas promueven la excelencia en las habilidades propias de los programas académicos, es necesario concentrarse en el desarrollo de habilidades blandas. Estas constituyen un conjunto de herramientas que ayuda a sortear diferentes situaciones donde el éxito o el fracaso va más allá del conocimiento técnico. Respecto al desarrollo de liderazgo, debemos abordar la inteligencia emocional, el aprendizaje activo, pensamiento crítico y la solución de problemas complejos entre otras habilidades.
Cuando una persona se involucra emocionalmente en una discusión, está fallando su inteligencia emocional. Es común observar en algunos entornos laborales diferentes interacciones negativas entre los miembros de un equipo. Mientras el ejercicio de argumentar es practico para solucionar problemas, una persona incapaz de argumentar positivamente podría destruir la confianza y moral del grupo
El aprendizaje es dinámico, requiere actualización continua y abierta hacia nuevos conocimientos. Ahora se requiere que las personas aprendan por iniciativa, partiendo de la curiosidad, esta habilidad es llamada aprendizaje activo.
Los problemas laborales cotidianos involucran dos habilidades importantes: el pensamiento crítico y la resolución de problemas complejos. En el primero, las personas son capaces de cuestionar la información disponible, basados en su propio conocimiento y en el consenso del equipo. Esto les permite evitar el sesgo inconsciente, donde una persona se inclina a favor de una idea preconcebida usualmente injustificada. Además, la resolución de problemas complejos involucra habilidades cognitivas, sociales y emocionales, que manejadas como un todo ayudan a resolver problemas que de otra manera no sería posible.
“Un líder se hace a través de la práctica, aprendizaje y entrenamiento, mas no a través de un nombramiento, ascenso o cargo que incluya la denominación.”
Anteriormente se pensaba que los líderes nacían con cualidades propias, por lo tanto, desarrollar nuevos líderes era imposible. El proceso de aprendizaje y crecimiento de líderes involucra varios actores: la empresa, las oportunidades laborales y la búsqueda de desarrollo personal. Cada uno de los cuales requiere un foco y actividades propias para mejorar el desempeño de la persona. La empresa juega un papel importante en el desarrollo o bloqueo del liderazgo, y aquí se incluye el concepto de la cultura organizacional que implica los valores, comportamientos y expectativas intrínsecos a cada compañía. Las interacciones en el entorno laboral deben promover el desarrollo del liderazgo. Cuando esto no sucede, se requiere una intervención para identificar los puntos a mejorar, luego se prepara un plan de acción y seguimiento. Por otra parte, las oportunidades laborales son benéficas para el desarrollo del liderazgo, ya que la continuidad y empleabilidad generan un entorno propicio.
Finalmente, la búsqueda de crecimiento profesional debe ser una iniciativa propia, con metas a corto, mediano y largo plazo. Estas últimas se denominan Grit, asociadas con la pasión por lo que hacemos y la perseverancia por alcanzar estas metas, lo cual constituyen el objetivo significativo de nuestras vidas.