Cuando la comunidad reacciona

En Popayán, se presentaron dos casos donde el trabajo conjunto entre la ciudadanía y la Policía permitió la captura en flagrancia de dos delincuentes.

Esta es la buseta donde se movilizaban las personas que redujeron a un delincuente que, tras subirse a este automotor, procedió a amenazarlos con un revólver. / Suministrada – El Nuevo Liberal.

Revólver incautado a uno de los delincuentes.

Dos antisociales fueron capturados luego que la comunidad se percatara del daño que habían causado y optaran por contrarrestar estas situaciones para después ya entregárselos a la Policía Metropolitana de Popayán.

Algo semejante ocurrió en dos puntos diferentes de las capital del Cauca. Uno en inmediaciones de la terminal de transporte y el otro al norte, sobre la carrera 9. En ambas situaciones, la ciudadanía reaccionó a tiempo, tras presenciar el comportamiento delictivo de los sujetos, optando por perseguirlos o a reducirlos para después ya dejarlos en poder de los uniformados.

Acerca de estos casos, el primero fue la captura de un joven de 24 años de edad, quien le arrebató un teléfono celular a una joven en inmediaciones del Éxito Panamericana para después emprender la huida, abordando un taxi. Sin embargo, otros transeúntes se percataron del indebido acto, entre ellos conductores de vehículos de transporte público, iniciándose la persecución del sujeto.

“En inmediaciones del cuerpo de bomberos y de un reconocido restaurante, el individuo desciendió del vehículo al ver que el conductor fue alertado de la situación, pero otros estaban ya cerca, entonces el joven quedó en manos de la ciudadanía, la cual lo redujo hasta que llegaron las patrullas para dejarlo a disposición de la Fiscalía”, explicó el comandante de la Metropolitana de Popayán, coronel Pompy Arubal Pinzón Barón.

Después, en horas de la noche, un grupo de pasajeros que se movilizaban en una buseta de transporte intermunicipal juntaron fuerzas para reducir a un delincuente que, tras subirse a este vehículo, intimidó a estas personas y al conductor para que entregaran dinero y otras pertenencias.

“El sujeto se subió en el sector de El Cairo, Cajibío, y se sentó, como si fuera un pasajero normal. Cuando el automotor se movilizaba por el sector del Sena, sede norte, esa persona se paró para amenazar al conductor y demás ocupantes con un revólver Smith & Wesson calibre 38. Sin embargo, el chofer continuó la marcha, y entre el ayudante y los usuarios procedieron a reducir al asaltante, golpeándolo entre todos. Como un usuario había dado aviso a la policía, entonces los cuadrantes del sector ejecutaron un ‘plan candado’ en la glorieta José María Córdoba o conocida también como Bella Vista”, dijo el coronel Pinzón Barón.

En dicho lugar, el conductor se detuvo y en ese momento los airados pasajeros y ayudante bajaron al antisocial a golpes de la buseta para que la policía lo capturara e incautara el arma de fuego.  Los uniformados primero trasladaron al asaltante a las instalaciones de la URI, y luego por orden del Fiscal, trasladado al Hospital Susana López de Valencia, donde le brindaron los primeros auxilios, quedando mientras tanto a disposición de la justicia.