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Por: Redacción fin de semana
@elnuevoliberal
El 7 de agosto no fue un día normal para los habitantes del norte del Cauca, pues entre ese martes y la madrugada del miércoles, mientras se daba la posesión Presidencial e Iván Duque asumía su primer día como Presidente de los colombianos, autoridades y ciudadanos de este Departamento registraban la cifra de que siete de sus municipios presentaban alteración en el orden público.
Los hostigamientos, la ‘moto bomba’ y los enfrentamientos entre Fuerza Pública y grupos al margen de la ley, habían regresado. Los hechos dejaron daños materiales, heridos y una víctima mortal, el comandante de la Estación de Policía de Padilla, Intendente Eddier Burbano, oriundo de La Sierra, con 21 años de servicio en la Policía Nacional, y quien tan solo tres meses atrás había regresado al Cauca, su departamento natal.
Desde diciembre de 2014, cuando presuntos guerrilleros del frente 29 de las Farc asesinaron a Santiago Garzón Castañeda, comandante de la Estación de Policía del municipio López de Micay, en medio de un ‘plan pistola’ que ese grupo guerrillero había ordenado en esa zona de la Costa Pacífica caucana, no se habían registrado más homicidios de este tipo, que enlutaran a la Policía y a toda la comunidad caucana.
Los oficiales de esta institución, también recuerdan que en noviembre de ese mismo año fue asesinado el Teniente John Álvaro Suárez Carvajal, oriundo de Santander y quien prestaba sus servicios como comandante de la Estación en Isla Górgona (Pacífico caucano). La estación fue atacada a la madrugada de un 23 de noviembre con tatucos por parte de las Farc y allí murió el Teniente de 26 años.
Tres años y medio después, para la institución y para los habitantes de estas localidades que escucharon los disparos y las explosiones el pasado martes, no ha sido fácil recuperar esa tranquilidad que tenían meses atrás. Hay temor entre los habitantes del norte del Departamento, por su parte las autoridades militares están prestas a lo que se ordene desde el nivel nacional, aunque por ahora y luego del Consejo de Seguridad que realizó el Gobernador del Cauca junto a comandantes de la Policía, el Ejército, alcaldes de la zona, y Fiscalía, la primera acción es militarizar las entradas y salidas ‘estratégicas’ en estos municipios nortecaucanos y estar alertas a cualquier movimiento que quiera volver a irrumpir la tranquilidad que vivía el Cauca.
“Sectores como Yarumales en Padilla, como Jagual en Corinto, como El Palo y Tierrero en Caloto, el Crucero de Gualí y otros puntos estratégicos, tendrán el accionar para desarticular estas bandas criminales, se redoblarán esfuerzos a la entrada y salida de las distintas cabeceras con retenes que estarán atentos a cualquier movimiento, debemos conjuntamente trabajar con la comunidad, la Fuerza Pública, la Fiscalía y todas las entidades del Estado, darle un golpe fuerte a estas estructuras criminales y dar un mensaje: el departamento del Cauca no está dispuesto a devolvernos a los años de confrontación”, fue lo expresado por el Gobernador Oscar Campo.
Así mismo, instó a que la ciudadanía participe denunciando cualquier tipo de actividad, de amenaza, de extorsión, de secuestro, de terrorismo; al igual que destacó el trabajo conjunto entre el Gaula Elite del Ejército, la Policía y la Fiscalía quien designó a dos Fiscales para poder hacer un trabajo de allanamientos y capturas en puntos donde hoy hacen presencia Gados residuales del sexto frente, quienes además de estar dedicados al narcotráfico, también están sembrando temor en los habitantes del norte del Departamento.
“Debemos trabajar conjuntamente para continuar con la ofensiva de estas estructuras criminales que no tienen estatus de beligerancia, por lo contrario, claramente están desnudas y hemos dado captura en este trabajo conjunto a alias ‘mordisco’, ‘crespo’, ‘cortico’, alías ‘mayimbú’, identificados criminales al servicio de estas bandas criminales y que pretenden a través de distintas actividades continuar sembrando zozobra”, puntualizó Campo.
Con estas acciones Departamentales, se espera garantizar la seguridad de los caucanos, pero es necesario desde el Gobierno Nacional la presencia del Presidente Duque, quien ya inició los recorridos por las regiones, estuvo en San Andrés y Providencia, en Norte de Santander, en Cundinamarca y en Tumaco, este último donde lideró un Consejo de Seguridad y dio órdenes precisas para la lucha contra el crimen organizado.
“No voy a aceptar como Presidente de los colombianos que se nos intimide con el secuestro. Ni que el secuestro se convierta en un mecanismo para chantajear al Estado colombiano. El mensaje es uno y es muy claro: Si el ELN tiene verdadera voluntad de desmovilización, desarme y reinserción, debe liberar a los secuestrados de manera rápida y sin condiciones”,
A lo que agregó, que Tumaco tiene “una situación grave de orden público y yo vengo a trabajar con las autoridades y a darle un mensaje claro a la delincuencia y es que la vamos a confrontar”. Por lo que desde el Cauca se espera que pronto Duque esté en este Departamento encabezando un Consejo de seguridad y encuentro con las autoridades del Departamento.
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