Las lluvias de las últimas horas tienen alerta a los cuerpos de socorro y a las autoridades de gestión del riesgo en la capital caucana.
Debido al fenómeno climático, dos rocas de gran tamaño cayeron al río Molino, hacia el oriente de la capital caucana, en zona rural a varios minutos de la carretera, llevándose por delante un árbol, cuyo tronco también fue a parar al afluente.
Ante esta situación, unidades bomberiles llegaron al sitio a fin de verificar si hay peligro de represamiento.
Sobre el particular, el comandante del Cuerpo de Bomberos de Popayán, Cbvp, capitán Juan Carlos Gañán, dijo que se analiza la posibilidad de fraccionamiento las dos piedras a fin de mitigar el riesgo de represamiento del afluente. “Trasladaremos el equipo de Usar Popayán con los demoledores y rotomartillos”, recalcó el oficial bomberil, agregando que “la tarea está coordinada por la oficina de gestión del riesgo municipal”.
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