Asunto de prioridades 2: respirar nos está matando

ANDRÉS JOSÉ CASTRILLÓN VALENCIA

Director Observatorio Infraestructura. Cámara de Comercio del Cauca

Hace unos días escribí para este diario una columna titulada ‘Asunto de Prioridades’ (http://elnuevoliberal.com/asunto-de-prioridades/), la cual buscaba llamar la atención de las autoridades locales respecto al “inexistente” control de emisión de gases por parte de vehículos diesel, en especial los de servicio público, para que ojala se cambiaran las prioridades de destinar el valioso recurso humano que sanciona a los violadores de la norma de Pico y Placa, a cambio de un seguimiento estricto y eficaz para sancionar a aquellos que están acabando con la salud de todos los habitantes de Popayán.

No era otra mi intención; pero sorpresa mayúscula cuando leí en el Diario del Cauca, en una entrevista al Secretario de Transito Municipal, que el funcionario dice “Buses contaminan por no poder renovarse”. (http://diariodelcauca.com.co/noticias/local/buses-contaminan-por-no-poder-renovarse-ruben-caicedo-celis-453134), con lo cual quede plenamente convencido que las prioridades en este tema no las define la administración municipal, puesto que con esta afirmación han quedado autorizados, los dueños de estos vehículos, para no cumplir ninguna de la normas referentes al cumplimiento de la revisión tecno-mecánica y de emisiones contaminantes para vehículos automotores (nombre completo) de sus vehículos por simplemente “no poder renovarse”. Si no pueden cumplir tan algo tan básico como es la sincronización del motor, mucho menos lo harán con todo el componente mecánico del vehículo, donde no solo se afecta a quienes nos chupamos toda la polución, sino a quienes nos subimos a una buseta en la cual se puede inferir que sus frenos, dirección, llantas, etc. pueden estar en el mismo estado que lo están sus motores contaminantes.

Señor alcalde, señores concejales, ciudadanía en general, no creen que ante una afectación tan grave como la denunciada debería hacerse una reflexión de hasta donde se va a permitir tanta falta de control, o acaso van a esperar que tengamos una tragedia debida a un accidente por falla de frenos porque simplemente los buses “no tiene con que renovarse”

Reflexión.

Una (1) de cada ocho (8) personas mueren en Colombia por problemas asociados a la contaminación del aire, y en el año 2015 en Colombia los costos en salud por muertes y enfermedades asociadas a la contaminación ascendieron a $ 20.7 billones (Léase bien BILLONES), que equivale al 2.6% del PIB (Diario La Republica). Tan solo en el Valle de Aburra el costo fue de $ 2.8 Billones, y ya en Popayán (algunos lugares y horas) ya estamos con niveles de contaminación similares.

¿Vamos a hacer algo a este respecto o simplemente vamos a dejar que callada y lentamente, con la complacencia de las autoridades, nos acaben con la calidad del aire y con la calidad de vida de la otrora ciudad en que se disfrutaba del placer de respirar sin el riego de envenenarse lentamente?

¿Pregunto una vez más, de quien dependerá invertir las prioridades?