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Por: Olga Portilla Dorado
“Son más las quejas que nos llegan que los programas de vivienda que hay”, dice la coordinadora de la oficina de vivienda de la Secretaría de Infraestructura municipal, Cecilia Guzmán, quien es la encargada de recibir las quejas de diferentes ‘incautos’ que llevados por el sueño de tener una casa propia caen en falsos negocios de personas inescrupulosas que ofrecen un lote o una vivienda.
Uno de los casos que conoció este medio fue el de Jorge* quien le pagó a Humberto* la suma de 6 millones de pesos por una casa en el proyecto de vivienda Las Guacas. Los hechos sucedieron el año pasado cuando, a través de un documento de compraventa autenticado en la notaría segunda de Popayán, Humberto le cedió un predio, supuestamente de su propiedad, a Jorge por un valor de 10 millones de pesos.
Tiempo después de que Jorge hizo el negocio con Humberto, éste le dijo que a raíz de una necesidad económica le vendería la casa en $6 millones, pero que los pagos deberían ser pronto, por lo que entre mayo y septiembre Jorge le pagó por partes: primero $4 millones, luego $500.000, después $700.000 y finalmente $800.0000, cubriendo así el valor total de la casa que le sería entregada en dos meses.
Pasado ese tiempo y al ver las evasivas de Humberto, Jorge decidió ir a la Corporación Minuto de Dios donde le dijeron que el señor no era propietario de la casa y no aparecía en la base de datos como beneficiario de los subsidios que para este proyecto asignó el Ministerio de Vivienda a través de Fonvivienda. Ante esto, el incauto ciudadano empezó a buscar al vendedor de quien no tuvo mayor razón, salvo la que le dijo un supuesto hermano: “no era la primera vez que Humberto estafaba a alguien”.
Sin casa y sin seis millones de pesos, Jorge decidió poner la denuncia penal en la Fiscalía por estafa. El caso está siendo investigado y se espera dar con el paradero de Humberto para que responda ante las autoridades por lo sucedido.
“Personas inescrupulosas acuden a ciertas modalidades, por ejemplo van y ofrecen un valor por una vivienda de la que ellos no son ni propietarios ni beneficiarios, o incluso en el caso de que sí son beneficiarios, vender la casa tampoco es legal, porque para ellos hay unas obligaciones como: vivir en esa casa por espacio de 10 años, además que tienen prohibido arrendarla”, señaló Cecilia Guzmán, coordinadora de la oficina de vivienda de la Secretaría de Infraestructura municipal.
Otra de las modalidades es la venta de predios en las invasiones: pequeñas casas hechas en madera y zinc, construidas en zonas de alto riesgo o sitios de protección especial donde no se puede habitar. En esos ‘ranchos’ también ven un negocio.
Así le pasó a Alicia* quien pagó $2’800.000 por un ‘rancho’ ubicado en el asentamiento Triunfemos por la paz, el cual está construido en tabla, piso de cemento, techo de zinc, y consta de dos pisos.
Sobre ese lugar no está permitido hacer ningún tipo de urbanización, porque la zona no cuenta con los permisos ni las licencias de construcción respectivas. Sin embargo, Alicia pagó ese dinero e incurrió en un engaño ya que cuando estas personas sean reubicadas o desalojadas no valdrá ninguna promesa de compraventa, porque vender en lotes que no son urbanizables es ilegal.
“Hay quejas de familias a quienes les han vendido lotes no urbanizables en invasiones ilegales. Negociar o vender uno de estos lotes o casas es una forma de estafar a la gente, porque allí la familia que lo compre nunca va a poder tener una vivienda digna porque es un sitio que no es urbanizable” señaló Guzmán.
La funcionaria además agregó que en la ciudad las personas también son engañadas vendiéndoles lotes en donde no se puede urbanizar, fenómeno que está sucediendo sobre todo en el área rural del suroccidente del municipio, ya que son zonas ubicadas por fuera del perímetro de lo que según el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) identifica como urbanizable.
“Compran un lote, lo lotean y los venden en pequeñas porciones, y cuando la gente quiere acceder a su vivienda y construirla no pueden porque resulta que el lote no es urbanizable, está fuera del perímetro sanitario y no tiene acceso a los servicios públicos”, aseveró la funcionaria.
Ante estos y otros hechos que han sido conocidos por las autoridades y la administración municipal, la oficina de Planeación de Popayán le ha venido siguiendo la pista a estos proyectos, los cuales a la fecha son aproximadamente 32 urbanizaciones informales conformadas en su mayoría por ‘asociaciones’ que a través de la venta de lotes posiblemente están incurriendo en el delito de urbanización ilegal.
-Asociación de vivienda El Bosque, -Variante Sur (3 proyectos), -Colinas de Fucha, -Colinas de Calicanto, -Banca Mutual del Macizo, -Asociación de vivienda Calicanto (Loma del pastel), -Recuerdo sur (quebrada La Monja), -Crucero de los Dos Brazos, -Los Dos Brazos, -El Túnel, -Ciudad Bolívar (crucero los Dos Brazos), -Túnel Alto y Bajo, -Villa del Sur (Villa Cifuentes), -Brisas la Ladera, -Vereda Puelenje, -Plan de vivienda Las Monjas, -Plan de vivienda Monserrat (Puelenje, Vereda de Torres), -Fundación Esmeralda, -Villa Santana (Altos del Palmar, Madrid, La Torre, entre otros), -Vereda Julumito (2 proyectos), -El portal de Los Lagos, -Sector El Rosario, -Proyecto de vivienda circunvalar al Huila, -Predio aledaño al Liceo Alejandro de Humboldt, -Vereda de Torres (2 proyectos aledaños a estadero y al polideportivo), -Fundación Voces de Esperanza, -Sector La Lajita
“Lo que sucede en Popayán es que una asociación compra un lote y lo empieza a vender a través de un plano por loteo, en ese momento la oficina Asesora de Planeación todavía no puede actuar porque mientras no exista una intervención en el predio no hay infracción urbanística, es por eso que consideramos que es posible que se esté configurando un delito que se llama urbanización ilegal. En ese sentido hemos remitido la información a la Fiscalía General de la Nación para que investigue la presunta configuración de ese delito”, dijo Francisco León Zúñiga, jefe de la Oficina Asesora de Planeación de la alcaldía de Popayán.
Según el jefe de esta oficina, los hallazgos que hasta el momento tienen son gracias a la denuncia y ‘alerta’ de los ciudadanos que informan que en tal sitio están vendiendo lotes o están construyendo, a través del control físico e inspecciones que la oficina de Planeación hace sobre la ciudad y por medio de la empresa de Acueducto quien en sus visitas ha visto cómo hay conexiones fraudulentas hacia otros sectores.
“Hay algunos que sí han hecho movimientos de tierra, ya han empezado a hacer vías, a poner acueductos, ellos ya están siendo sancionados. Por otro lado hemos pedido colaboración a la Fiscalía que ya ha tomado medidas en el asunto y han asignado un investigador para determinar si realmente se está configurando ese delito”, dijo Zúñiga.
Por su parte, el director seccional de Fiscalías en el Cauca, Raúl González Flechas señaló que hay un grupo especial del CTI que en coordinación con Planeación municipal está desarrollando una ‘investigación macro’ sobre el tema para lograr las judicializaciones pertinentes frente al delito de urbanizaciones ilegales.
“Hay inescrupulosos aquí en la ciudad que están aprovechando algunas zonas aledañas a la ciudad o rurales con proximidad al casco urbano para hacer proyectos de vivienda a bajo costo, y a través de esas actividades están engañando a los ciudadanos para que adquieran esos planes de vivienda. En ese sentido la Fiscalía ya está atenta al tema y esperamos muy pronto dar resultados frente a estas conductas”, indicó González Flechas.
Evite ser engañado y estafado
Ante esta problemática, la principal recomendación que dan las autoridades es que los ciudadanos interesados en adquirir un plan de vivienda o comprar un lote se aseguren ante la oficina de Planeación o ante la oficina de vivienda municipal si estas personas son o no urbanizadores legales, si cuentan con la licencia de construcción, si el lote que quieren comprar puede urbanizarse y si al final del proyecto les entregarán o no escritura.
“Se le pide a la gente que verifique bien, si tiene licencia pedírsela, preguntarle si le van a dar escritura al final, si le dice que no, que es global, que espérese… es posible que esté entrando en algo ilegal; y por último hemos dicho también a la ciudadanía que se acerque a la oficina de Planeación y pregunte si en el lugar donde va a comprar está permitido o es un proyecto inscrito aquí, porque nosotros aquí tenemos inscritos a los urbanizadores y a los proyectos”, explicó Francisco Zúñiga, jefe de la oficina de Planeación.
De igual forma recordó, que todo urbanizador debe estar registrado en la oficina de Planeación, y que éste debe cumplir con ciertos requisitos como Cámara de Comercio, además que si va hacer captación de dinero debe tener un permiso especial para eso, y la licencia de construcción que solo la expide la curaduría. Adicional a ello, “el tema de que por política se va a decidir qué zonas son urbanizables o no, es falso, ya que el POT se está construyendo de una manera técnica”.
Finalmente, adicional a las recomendaciones anteriores, los funcionarios también expresaron que así como hay proyectos de vivienda de grupos o particulares que son legales, también existe la posibilidad de acceder a una casa a través de los programas del Estado, los cuales se dan a conocer a través de las entidades territoriales para que las personas que lo necesitan se postulen y puedan acceder a ellos, y no arriesguen tanto sus recursos económicos como sus sueños.
*Nombres cambiados a petición de la fuente
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