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    Asesinado suboficial del Ejército Nacional

    06:58 pm 02-julio

    El fallecido estaba adscrito a una unidad en Caquetá, fuerte militar Larandia.

    José Emilio Viáfara González, era suboficial del Ejército Nacional en el grado de sargento segundo. / Foto tomada de Facebook.com-El Nuevo Liberal

    En el municipio de Puerto Tejada un suboficial del Ejército Nacional identificado como José Emilio Viáfara González, natural de esa localidad fue asesinado.

    De acuerdo con las primeras informaciones el crimen ocurrió durante una riña luego que el uniformado interviniera para evitar un robo.

    Alrededor de las 4:00 de la madrugada de este lunes primero de julio, en el barrio La Esperanza de Puerto Tejada, se presentó una riña entre particulares e integrantes de la pandilla Los Machados, poco después de haber hurtado unos elementos. Los sujetos dispararon e hirieron al militar.

    Viáfara González, tuvo una lesión por impacto de arma de fuego en la espalda por lo que fue trasladado al hospital local de Puerto Tejada donde falleció por la gravedad de la herida. Es de anotar que la víctima era suboficial en el grado de sargento segundo y se encontraba en compañía de otro militar con el mismo grado al momento de los hechos.

    El coronel Royer Gómez Herrera, comandante de la Tercera Brigada del Ejército, descartó que Viáfara González perteneciera al batallón Pichincha con sede en el Valle y norte del Cauca. El fallecido estaba adscrito a una unidad en Caquetá, fuerte militar Larandia.

    En su perfil de Facebook, el suboficial escribió el 20 de abril de 2018: “soy militar por vocación, orgulloso de la profesión que he elegido, decidí ir a estudiar a la Emsub por encima de cualquier otra institución a nivel nacional, me siento orgulloso de portar mi uniforme, mis medallas, mis cursos, de ser un soldado que le aporta seguridad a un país… saben que es lo mejor de todo, que gracias a esas personas que tomaron la decisión de ser militares o policías, muchos colombianos pueden vivir tranquilos, pueden realizar sus estudios profesionales, viajar por Colombia, ir a sus fincas a descansar con sus familias y en especial montarse en una tarima a ejercer su derecho a la libre expresión…”.