Reflexiones

CARLOS E. CAÑAR SARRIA

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Primera. El aumento del salario mínimo no llena las expectativas de los trabajadores colombianos para quienes se hace cada vez inalcanzable su legítima aspiración de vivir en condiciones de dignidad. El salario mínimo colombianos es uno de los más bajos de la región latinoamericana. Colombia es un país donde la pobreza e indigencia proliferan debido a un sistema económico inequitativo, a la falta de líderes con sentido social, a  la campante corrupción política-administrativa y a otras patologías que hacen imposible la construcción de una democracia que garantice el bienestar de las mayorías. Se anuncian protestas por parte de los trabajadores inconformes con el salario mínimo que quedó en $781.242 con el incremento del 5.9% que fue concertado entre Gobierno, empresarios y trabajadores.

Segunda. No estuvimos en Popayán durante las Fiestas de Reyes, pero nos enteramos del desarrollo de  la programación mediante informes de prensa y en las redes sociales. Hay aciertos de la Administración Municipal en cuanto a la supresión del uso abusivo del agua, control a los motociclistas, conciertos populares, desfiles de carrozas, etc, seguramente habrá cosas por mejorar pero el balance es positivo. El problema es que en Popayán abundan los criticones, nada les parece, palo porque bogas y palo porque no bogas. Ni hacen ni dejan hacer.

Hace varios años un alcalde fue criticado porque prolongó prolongó las entonces Fiestas de Pubenza a casi dos semanas; el alcalde actual las redujo a dos días y ello está bien, pero también fue criticado.

Tercera. Que hubo cambios del mal llamado Pico y Placa en Popayán. Se prolongó una hora diaria, ya no será hasta las siete sino hasta las ocho de la noche. Hemos sido enfáticos en señalar que Pico y Placa es en horas Pico y no todo el día, como en otras ciudades del país. En Popayán lo que en verdad existe es Día y Placa porque la restricción es durante todo el día y no durante las horas Pico.

Si recordamos, una de las promesas de campaña del alcalde César Cristian Gómez fue suprimir esta modalidad del Pico y Placa y al inicio de su mandato hizo unos ajustes que fueron bien recibidos por la ciudadanía, pero al poco tiempo de implementados, protestaron los transportadores y el alcalde se dejó intimidar y las cosas volvieron a quedar como estaban.

Cuarta. Vemos complicada la implementación de foto multas en nuestra ciudad. En primer lugar porque aún no existe una infraestructura vial que garantice su eficaz operación; la malla vial continúa en precarias condiciones a pesar de los grandes esfuerzos de la administración municipal de mejorarla dentro de los proyectos de Movilidad Futura,  y en segundo lugar, porque se hace necesario enfatizar primero la cultura ciudadana.

Ya entra en vigencia la ley que exige que la ganancia de las empresas privadas que invierten en los equipos para las foto multas no sean superiores al diez por ciento y no como venían operando que se llevaban la mejor tajada. Esto también haría falta en el caso de las grúas, que todos sabemos es un negocio lucrativo y por eso no se pierden un mínimo descuido de los infractores. Ojalá que con la misma pasión con que operan las grúas funcionaran los gobiernos locales a la hora de garantizar la seguridad ciudadana, descuidada en no pocas ciudades como en Popayán, que en muchas ocasiones se siente y se evidencia una ciudad al garete.

Quinta.

Tránsito municipal y la Secretaria de Infraestructura no deben seguir haciéndose los de la vista gorda ante los huecos que dejaron en la Vía Pomona al levantar los reductores de velocidad. A algunos  huecos ya les está saliendo pasto. Recordemos que está Vía es nueva, se demoró diez años y tres administraciones para  terminarse y aún falta concretar el retorno. Alcalde Gomez ordene a quien corresponda tapar los huecos para que no se siga deteriorando la transitada  Vía.

Da grima observar cómo un bien de uso público comienza a deteriorarse apenas nuevo. Insistimos que está inquietud que hemos ventilado en los medios de comunicación es el sentir de los habitantes de todos los sectores y barrios colindantes con la Vía. Y ya es tiempo de que el gobierno local le ponga manos al asunto; lo mismo a la iluminación y la seguridad que son insuficientes. Hace falta vigilancia y cámaras de seguridad en este sector que en varias ocasiones sus habitantes y la población universitaria han sido víctimas de atracos y saqueos de casas y apartamentos.

Coletilla. En Facebook un candidato al senado comparte el siguiente mensaje : “Poderoso ritual para traer abundancia en el 2018: levántate temprano y salí a trabajar”. Es un insulto y humillación a miles de desempleados en un país carcomido por la exclusión, la falta de oportunidades, la pobreza y la miseria.