Comentarios recientes

    Archivos

    Categorías

    Madres solteras en tiempo de pandemia

    Luchan solas por sacar adelante a sus hijos y ahora con el agravante de la pandemia.

    Jazmín Muñoz Yela

    Estas mujeres llevan con orgullo la dicha de ser mamá. / Foto suministrada – El Nuevo Liberal.

    “Yo no voy a ser papá tan joven. Esa fue la respuesta del padre de mi hija cuando le dije que estaba embarazada, dese ahí no lo volví a ver y con quince años asumí la responsabilidad de mi pequeña trabajando en casas de familia, con eso lo he mantenido, pero esta situación del virus me complico la vida”, indicó Flor Muñoz, madre soltera.

    Flor, Sandra y Ximena son tres madres solteras contemporáneas que se conocieron en el jardín de sus hijos y han sido amigas por varios años y ahora por la pandemia terminaron viviendo juntas para sobrellevar la carga económica.

    “Quedé en embarazo a los 17 años. Salí del pueblo a buscar una mejor oportunidad estudiando y me enamoré. No contaba con que las promesas de amor del padre de mi hijo solo eran válidas para llevarme a la cama y a esa edad la ingenuidad me ganaba, así que ahora estoy criando a mi hijo sola y tratando de buscar un mejor futuro, no solo para mí, sino también para él que no tiene la culpa de las decisiones de sus padres”, agregó Sandra Molina, madre soltera.

    Ellas les han asegurado vivienda, comida y educación a sus hijos, todo a través de sus patrones, como ellas los llaman, quienes les dieron la oportunidad de vivir y trabajar en sus casas y tener junto a ellas a sus pequeños. Pero el coronavirus les cambió la vida.

    “A los 16 conocí al papá de mi hijo en Popayán, quien me lleva 10 años. A los 17 quedé en embarazo, él se puso feliz y asumió la responsabilidad, pero como era de Cali dijo que teníamos que vivir en Cali. Yo dije que sí, porque igual mis padres me dieron la espalda y estaban enojados conmigo. Pasamos dos cinco años juntos, trabajando y ahorrando para comprar un lotecito, el cómo obrero en construcción y yo como empleada, pero él murió en un accidente y quedé sola con mi hijo. Por fortuna ya habíamos pagado una parte del lote y habíamos hecho un ranchito, cinco años después acabe de pagar con lo que ganaba como empleada doméstica, pero ahora me he quedado sin empleo y es lo único que se hacer”, agregó Ximena Suarez.

    La payanesa ha sido en parte la salvación para Sandra y Flor, quienes vivían en Cali de arrendo la una y la otra con sus jefes. Pero por el virus a ambas no las volvieron a llamar a trabajar y se quedaron sin con que pagar arrendo la una y sin techo y sin plata la otra.

    “Nos conocemos por el jardín de los niños, poco después de empezar todo esto se quedaron sin trabajo y sin cómo pagar vivienda, entonces las recibí en mi ranchito, es muy pequeño, pero cabemos las tres con nuestros niños. Laura Simón y Martín tienen la misma edad y se llevan muy bien, pero con el virus nos hemos visto en dificultades para llevarles la comida. Hemos recibido ayudas del gobierno, pero solo una salió beneficiada. Mi hijo me dice quiero dinero para darte un regalo por el día de la madre, yo solo pienso que necesito dinero para seguir dándole de comer”, indicó Ximena.

    loading…


    Estas tres mujeres, ahora dada la situación colocaron un negocio de venta de arepas, masas y empanadas, abren la puerta con una vitrina que no sobresale mucho para que no les pongan problema.

    Así, haciendo honor al don de ser madres, algo que han acogido con mucho amor, ellas recibirán un feliz día mamá sin regalo, tal vez una tarjeta de sus pequeños, pero con el orgullo de saber que han sabido salir adelante, decidieron no abortar, no dar en adopción, no volver a tener pareja por ahora, para dedicarse en cuerpo y alma a sus niños, con quienes están seguras podrán construir el futuro que siempre han deseado.

    loading…