La idea del socialismo a lo cubano

La visión que tenía de universalizar la revolución cubana al mundo Fidel Castro y llevar a todos los rincones las ideas socialistas.

Por: Francisco Piedrahita Pérez

mag(c) Relaciones Internacionales UASB – sede Ecuador

Admon de Empresas UNAD

John Okello al centro con el kepis puesto junto a miembros del grupo revolucionario. Fotos suministradas – El Nuevo Liberal

Uno de los primeros éxitos de los cubanos en el continente africano fue cuando un reclutador cubano observó como un zanzibareño llamado John Okello.

Casi desde el mismo momento en que la Revolución Cubana había triunfado, Fidel Alejandro Castro Ruz el arquitecto de este empeño social, empezaba a idear la manera de exportar su propia idea de revolución, la revolución tipo Cuba.

El contexto

En los años que inician el decenio de los 60, la guerra fría empieza a tomar unos matices más dramáticos, por un lado los Estados Unidos daban inicio al programa Alianza para el Progreso, que consistía en un programa de ayuda económica, política y social cuyo propósito era impedir que la revolución cubana se expandiera por el resto del hemisferio occidental; por otro lado los países socialistas habían formado desde el año 1949 el Consejo de Ayuda Mutua Económica el COMECON, cuyo fin era el fomentar principalmente las relaciones económicas frente a los países de economía capitalista.

Pero había un continente que aún vivía su diario vivir bajo el influjo de una metrópoli europea, África que hasta la Segunda Guerra Mundial solo habían 3 países independientes, el resto de toda su extensión eran colonias, pero esta situación cambiaría radicalmente desde el año 1945 con el reacomodo de las fuerzas políticas a nivel mundial que se concentrarían en dos bandos uno liderado por Estados Unidos y otro por la URSS; Francia y la Gran Bretaña conservarían las colonias pero a un costo muy alto.

Los años 60

Corrían los años 60 y varias regiones en África en especial las de la costa Este iniciarían su camino por la independencia de Gran Bretaña, en las agendas de los países del sistema socialista como la Unión Soviética y la China ya se marcaba un interés que iba creciendo cada día por ganar como aliados a esos nuevos países.

Ya con la progresiva salida de Gran Bretaña del África, todas las demás colonias empezaban a generar movimientos independentistas, pero había un par de islas en el océano Indico que se convertirían en el núcleo sobre el que se expandiría la idea de revolución socialista, las islas de Zanzíbar y Pemba, quienes se encontraban bajo mandato británico y ya estaban en camino de su independencia, pero esta había sido un arreglo ignominioso entre los británicos y una minoría de origen musulmán que pretendía establecer lo que otrora fuera un sultanato lugar donde se cometían toda clase de vejámenes contra la población negra por parte de los islamistas como por ejemplo la venta de esclavos, estas islas son famosas por su producción de especias como la pimienta, la canela y la nuez moscada.

Cuba

La visión que tenía de universalizar la revolución cubana al mundo Fidel Castro y llevar a todos los rincones las ideas socialistas es que fue el primero en ver en la lucha por la independencia de la colonias de África una oportunidad importante, la misma que no habían visto los norteamericanos, solo los chinos y los soviéticos estaban muy interesados en ser los que orientaran a futuro la política de los que serían los nuevos países.

Durante el año 1963 los emisarios de Castro en África habían establecido usa serie de bases desde donde proclamaban las virtudes de la revolución cubana, la principal base estaba en Casablanca lugar donde llegaban los barcos desde la isla con armas y la logística necesaria, luego se distribuían por los sitios estratégicos donde las avanzadas cubanas ya estaban establecidas y de regreso esos barcos llevaban a jóvenes del África central que iban a recibir entrenamiento revolucionario, desde la visión propia que Cuba tenía de concebir y propagar una revolución.

Uno de los primeros éxitos de los cubanos en el continente africano fue cuando un reclutador cubano observó como un zanzibareño llamado John Okello tenía las aptitudes para convertirse en un líder revolucionario, estas aptitudes le sirven como cualidades para ser enviado a la isla de Cuba a recibir instrucción ideológica y entrenamiento en la guerra de guerrillas.

Okello regresaría a la isla de Zanzíbar para organizar una revolución pero a bajo su concepción y el 12 de Enero de 1964 a las primeras horas de la mañana él junto a otros de los revolucionarios entrenados en Cuba dan inicio a las operaciones que conducirían a la toma del aeropuerto, luego sobre el palacio del Sultán y la armería para obtener las armas; la estación de policía se resiste a los ataques que por ser desorgani­zados tardarían un poco más de tiempo en rendirse a Okello y sus tropas pero a las 4 y 30 de la tarde de ese día también se rendirían.

La orden que Okello había dado a sus tropas revolucionarias era que había que matar a todos los árabes que estuvieran entre las edades de 18 a 25 años, las rabias contenidas contra los árabes estaban a punto de estallar, los siglos de opresión de esta minoría contra los habitantes originarios ya no se podían contener y la cifra final de muertos durante el tiempo que Okello duró en el gobierno lo atestiguan unos aseguran que fueron 5 mil árabes y otros que la cifra llega a los 20 mil muertos.

Fidel Castro ya con la victoria revolucionaria ganada en Zanzíbar emplea la isla como un trampolín para exportar la idea revolución cubana al resto del continente, pero este sueño se vería interrumpido por la entrada de dos nuevos actores: los chinos y los soviéticos, claro los chinos tenían en muchos países grandes colonias de sus coterráneos y esto era una gran ventaja, pero no logró materializarse de una manera tan fuerte como se esperaba, los soviéticos ofrecían a los africanos una serie de propuestas que se hacían difíciles de rechazar.

Los soviéticos no podían permitir que la revolución y las ideas socialistas fueran difundidas por un recién llegado a la escena ellos veían a Fidel Castro, la nación que se autodenominaba como la patria del ideal socialista era y debía seguir siendo la Unión Soviética nadie más, y esto llevó a negociar con Castro la salida de Cuba del continente a cambio de la llegada a la isla de 5 mil instructores en todos los campos del saber así como también de empréstitos y una serie de convenios comerciales y energéticos entre ellos estaba la construcción de una planta nuclear, solo Cuba al final terminó apoyando a un aliado que si conservó los lazos desde África, este país fue Angola.