“La fortaleza del Cauca es su gente y biodiversidad”

Fidel Camilo González, presidente de Indepaz expresó la relevancia de la iniciativa ‘la cumbre del Cauca en el macizo’.  

Eliana Gómez Hurtado

Fidel Camilo González, presidente de Indepaz, y exministro de Salud. / Alexander Paloma – El Nuevo Liberal

El Nuevo Liberal dialogó con Fidel Camilo González, presidente del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, y exministro de Salud durante el gobierno de César Gaviria, para conocer su opinión sobre lo que fue el evento de ‘la cumbre del Cauca en el macizo’; un diálogo entre los distintos actores de la región, en donde se analizó la situación actual del Departamento en temas económicos, sociales, políticos y de medio ambiente.

González ha trabajado con esta organización desde hace más de 25 años, acompañando a las comunidades, los procesos de paz y la construcción de acuerdos de convivencia, además fue firmante del acuerdo de la Asamblea constituyente y participó de los procesos de negociación en el Guaviare y en la Habana, Cuba, etc.

Con respecto al evento que congregó a centenares de caucanos, el exministro dijo que el encuentro fue un ejemplo de unidad en la región, de todos los sectores y propósitos comunes, que se plasmó a través de un documento que fue entregado al Gobierno Nacional, “con el fin de superar los problemas estructurales crónicos que lo han ubicado entre los últimos indicadores de calidad de vida y los primeros de pobreza en toda Colombia y de inequidad”, explicó González.

En este escrito quedaron registrados los planteamientos más sentidos de las comunidades frente a la derogación de los títulos mineroenergéticos y licencias ambientales, en donde el 90 por ciento de los territorios del Macizo colombiano están en emergencia por los múltiples proyectos de minería y explotación de recursos hídricos por parte de las multinacionales.

“El Departamento tiene una titulación de muchos territorios en el macizo, en la parte alta del nudo de Almaguer y núcleo central del macizo hasta el núcleo del Cauca, pero también la parte plana en el norte y en el pacífico, entonces la gran pregunta es si la vocación de esta región es minera o si es una visión con un desarrollo sostenible desde el punto de vista ambiental y donde la prioridad sea el agua y la sostenibilidad con la gente y no el desplazamiento por la minería”, expresó el docente.

Visión de desarrollo

De acuerdo con el presidente de Indepaz, “lo que uno ve en el pacto por el Cauca, (documento que recogió las inquietudes de los sectores en la cumbre) es que la fortaleza en el Departamento es su gente y la biodiversidad. Dicen que si no hay un entendimiento con la naturaleza no hay desarrollo”, indicó el investigador.

Y es desde allí donde, según este mediador de paz, se requiere de una gran inversión pública y privada, “con una mirada de sentido social y además articulada a la mediana y pequeña producción”, precisó el profesional.

Según el exministro, la cumbre fue un buen ejercicio, donde el propio Ministro de Ambiente, Ricardo José Lozano, mostró una reacción positiva y de atención a lo que en su momento expresó la comunidad; esto impulsado aún más con el anuncio que realizó el Gobernador del Cauca, Óscar Rodrigo Campo cuando dijo que el “macizo colombiano no está en venta”.

Hasta el momento se espera una respuesta satisfactoria en el tema de la pobreza, marginalidad, abandono estatal, violencia, disputas territoriales (minería ilegal y narcotráfico), así como los asesinatos y amenazas a líderes sociales.

A este evento participaron cerca de 17 alcaldes de los distintos municipios del Departamento, así como diputados, concejales  y comunidad en general.

Punto de quiebre de un intento de negociación

Respecto al atentado perpetrado por el Eln en la Escuela de cadetes de Bogotá, el dinamizador de paz dijo que la situación es lamentable, “no solamente por la muerte de los cadetes y estudiantes de la policía, sino porque este ha sido el punto de quiebre de un intento de negociación de paz, en donde se ha demostrado que la única salida es el diálogo”.

Para González esto significa un ciclo de confrontaciones entre las partes, donde el estado buscará la manera de reducir al Eln y este grupo al margen de la ley plantear una serie de estrategias para demostrar que tiene fuerza. “Lo que debe existir es una gran presión social sobre este grupo para que no haga del departamento un territorio de horror y una presión también sobre la fuerza pública para que la proporcionalidad del uso de la fuerza esté focalizado y no generalizada”, agregó el presidente de Indepaz.