Atroz crimen en zona rural de Caloto

Un campesino de este municipio fue asesinado al interior de su casa, al parecer, por delincuentes que ingresaron para apoderarse de dinero u objetos de valor.

 

Tristeza entre los habitantes de Caloto, al conocer la triste noticia del asesinato de uno de sus habitantes, el campesino Floresmiro Noriega. Según la información aportada por las autoridades, el mortal hecho se presentó en la vereda Santa Rosa, del municipio nortecaucano cuando la víctima había culminado una jornada de trabajo agrícola y se dirigía a descansar a su casa. Cuando ya se disponía a reposar en su cama, unos delincuentes, armados con machetes y cuchillos, ingresaron a su residencia, buscando despojarlo de una gruesa suma de dinero, que supuestamente tenía almacenada en su vivienda.

“Lo que conocemos del caso es que Floresmiro estaba reparando su casa y los delincuentes creían que él contaba con bastante plata. A pesar de decirles la verdad y de suplicarles que todo era suposición de ellos, pues no creyeron; lo llevaron hacia una parte oscura donde unos tipos se quedaron vigilándolo y otros rastrearon por todos los rincones para encontrar la supuesta plata”, manifestaron integrantes de la Policía que conocieron el caso.

Mientras tanto, familiares del campesino denunciaron que los sujetos al constatar que no había nada de plata o cosas de valor en el sitio, al parecer se llenaron de ira y arremetieron contra el dueño de la casa, provocándole varias heridas con machete y cuchillo. De igual manera fue golpeado.

“Tristes porque a nuestro amigo le cortaron los brazos a punta de machetazos, y no conformes con eso, le propinaron varias puñaladas en la espalda con cuchillo, las cuales acabaron con la vida de esta gran persona que solo se dedicaba trabajar y hacer el bien a la comunidad”, denunció la familia.

Luego que las autoridades judiciales realizaran el levantamiento del cuerpo, este último fue llevado a la morgue del hospital local. Después, la familia adelantó los trámites para reclamarlo y así brindarle el último adiós.

“Que la Policía y el Ejército adelanten más patrullajes, especialmente en la zona rural, porque hay muchas personas que habitan en estos puntos y están a la merced de los delincuentes, como el caso de Floresmiro, víctima de la inseguridad que ronda en los campos”, agregaron los familiares.

El Nuevo Liberal consultó qué opinaba la Policía, frente a esta denuncia, pero el mando directivo de esta institución optó por no pronunciarse al respecto.